Ubicado en el norte del país, el municipio de Paredes es parte de la región del Duero Litoral y pertenece al distrito de Oporto, a aproximadamente un cuarto de hora de la ciudad.
Tiene su sede en el antiguo municipio de Aguiar de Sousa, que se remonta a los inicios de la nacionalidad, e integra una de las regiones paisajísticas más interesantes de Portugal, el Valle de Sousa. También tiene una fuerte tradición industrial, donde predomina el sector de la madera: alrededor del 60% de los muebles portugueses se producen aquí.
Los molinos de viento, los castillos, las iglesias, los monasterios medievales, las granjas y los blasones blasonados enmarcan un paisaje principalmente forjado en verde, entre montañas y valles bañados por ríos y arroyos de aguas cristalinas, en comunión con la naturaleza que contrasta con la modernidad de los centros urbanos.
También marcado por un fuerte desarrollo industrial en las últimas décadas, la competitividad del municipio de Paredes se ve reforzada por las excelentes condiciones de accesibilidad vial. Cuenta con tres autopistas (A4, A41, A42), que lo colocan a solo minutos de las principales salidas internacionales, como el aeropuerto Francisco Sá Carneiro y el puerto de Leixões, y aproximadamente a una hora de Galicia.
También es servido por la línea ferroviaria del Duero, que conecta dos sitios del Patrimonio Mundial: el Centro Histórico de Oporto y la Región del Vino del Duero.
Este municipio es rico en testimonios arqueológicos, que determinan que hace más de 5000 años el hombre eligió el territorio del actual municipio de Paredes para vivir y morir.
En la región actual de Castromil y Banjas, hay rastros importantes de la extracción de oro de la época romana, que llegaron a esta región en busca de riqueza.
Con respecto a las artes y la artesanía, este municipio tiene prácticas casi olvidadas en la actualidad, de las cuales destacamos el herrero, el tallador, el zapatero y el tejido de canastas.
Los manjares que podemos degustar son: el niño asado al horno de leña, la sopa seca y la regueifa.